Este paraje se encuentra ubicado entre la Vía Verde (a la altura de El Cubillo) y Las Torrenteras. Viniendo por la Vía desde Albacete, cuando se llega a la altura de El Cubillo, se abandona la Vía hacia la izquierda, quedando el paraje a unos 300 metros. Su aparición se cree ligada a la construcción de la vía de ferrocarril Baeza-Utiel ( 1926-1964 ).

Según cuentan nuestros mayores, la necesidad de voladura del cerro para proseguir con la colocación de las traviesas hizo que se destrozasen grandes rocas, cuyos pedazos de irregular tamaño quedaron diseminados en este terreno, asemejándose en conjunto a los maltrechos dientes de una persona mayor. De ahí su nombre.

Precisamente en este punto de la Vía Verde existen, en el talud de la misma, una serie de cuevas o excavaciones de origen incierto; su entrada es amplia, pero conforme se entra se va estrechando y nadie ha llegado o se ha atrevido a introducir hasta conocer su final.